lunes, 31 de enero de 2011

Un tranvía llamado deseo

Título: Un tranvía llamado deseo (A streetcar named desire)
Director: Elia Kazan
Intérpretes: Vivien Leigh, Marlon Brando, Kim Hunter, Karl Maden
Año de estreno: 1951

Tennesse Williams fue un famoso dramaturgo norteamericano, autor de dos famosísimas obras de teatro que contaron con sus propias y exitosas adaptaciones a la gran pantalla: Un tranvía llamado deseo y La gata sobre el tejado de zinc caliente. No puedo decir de ellas que sean películas que, al contrario que otras que me interesaban más, haya buscado ex profeso para verlas (en parte porque su argumento no me es desconocido), aunque como buenos clásicos, cuando una de ellas ha sido emitida en televisión, no he perdido la oportunidad de verla.

Un tranvía llamado deseo se inicia con la llegada Nueva Orléans de Blanche DuBois, una atractiva mujer madura de Auriol, Mississippi, que se traslada a casa de su hermana menor, Stella. Blanche es una mujer etérea, que vive en un mundo de fantasías, caracterizada por sus delirios de grandeza y sus intentos por mostrarse atractiva, ocultando para ello su verdadera edad, pues planea volver a casarse. Su opuesto es el marido de su hermana, Stanley Kowalski, un rudo transportista de origen polaco que capta desde el primer instante los delirios y mentiras de Blanche y planea desenmascararla en todo momento, especialmente cuando Mitch, uno de sus mejores amigos, comienza a sentirse atraído por Blanche.

La película, como otras de su época, presenta temas de gran crudeza gracias a escenas emblemáticas y a personajes de una construcción fascinante; aunque suele recordarse a Marlon Brando por su actuación como Stanley, en mi opinión la mejor intérprete de la cinta es Vivien Leigh (que obtuvo un muy merecido Óscar por su papel), actriz que recrea a la lunática, hipócrita y al mismo tiempo ingenua Blanche de manera especialmente creíble, y lo digo con conocimiento de causa, ya que conozco a una persona muy parecida a dicho personaje. El conjunto global de la película resulta muy interesante, y se nos obsequia con una frase memorable ("Siempre he dependido de la amabilidad de los desconocidos"), aunque, por la época en que se rodó, se eviten escenas y detalles narrativos conflictivas necesarias para comprender el desenlace de la historia.

Puntuación: 9

lunes, 24 de enero de 2011

Poder absoluto

Título: Poder absoluto (Absolute power)
Director: Clint Eastwood
Intérpretes: Clint Eastwood, Gene Hackman, Ed Harris, Laura Linney
Año de estreno: 1997

Cada vez que veo una película de Clint Eastwood me admira lo incombustible que es a sus 80 años, que se dice pronto. Después de haber sido una estrella del western y del cine de acción, se ha reciclado como el perpetuador de una línea de cine que es heredera del cine más clásico, y rueda películas con un sello muy característico. Aunque Poder absoluto podría considerarse, a estas alturas, como una película "antigua", sigue siendo perfectamente reconocible la huella de Eastwood en el tratamiento de los personajes y la historia.

Poder absoluto nos presenta a un experto ladrón de joyas, Luther Whitney, que planea dar el último gran golpe para poder retirarse, y para ello elige la casa del anciano multimillonario Walter Sullivan. No obstante, en plena faena, aparecen la joven esposa de Sullivan, Christy, y su amante, que no es otro que Alan Richmond, el presidente de los Estados Unidos. Borrachos, comienzan a practicar sexo, pero en un momento dado la cosa se pone violenta y Christy acaba muerta, acribillada a tiros por dos agentes del Servicio Secreto que trabajan como guardaespaldas del presidente. Entre éstos y la jefa de gabinete del presidente, Gloria Russell, deciden deshacerse de todas las pruebas que incriminan a Alan para que parezca obra de un ladrón. El nombre de Luther no tarda en aparecer en la lista de sospechosos, ya que se trata de un caso complejo, pero el agente de homicidios Seth Frank no lo ve tan claro, y por supuesto, Luther no va a permitir que el presidente quede impune.

Poder absoluto no se encuentra estadísticamente entre las películas más exitorsas de Clint Eastwood, y es muy posible que se viera oscurecida por la genial Medianoche en el Jardín del Bien y del Mal (que tampoco en su momento tuvo una acogida 100% positiva), estrenada ese mismo año. Sin embargo, Poder absoluto tiene un desarrollo apasionante e involucra a unos personajes de mentalidades muy interesantes, con dualidades morales que, aunque podrían ser más explotadas, dan bastante juego. Clint Eastwood se adjudica un papel que le va como anillo al dedo (el papel de siempre, vaya) y llena la pantalla con su interpretación.

Puntuación: 8

En busca de Klingsor

Título: En busca de Klingsor
Autor: Jorge Volpi
Año de publicación: 1999
Editorial: Booklet

Para que no parezca que he acabado por renegar de toda literatura que no sea juvenil, he aquí la reseña de la última novela, ¿cómo decirlo? no-juvenil que he leído últimamente. Terminar este libro no me ha resultado fácil a pesar de ser recomendación de una de las personas en las que más confío en materia literaria, que es mi tío, pero lo cierto es que, aun siendo una novela de misterio y suspense, los protagonistas son físicos que buscan a otros físicos y para eso preguntan a más físicos: para alguien tan de letras como yo, hubo fragmentos que me resultaron verdaderamente áridos.

Recién acabada la II Guerra Mundial, un brillante físico norteamericano, Frank Bacon, se alista en el Ejército y es enviado a Alemania con una misión muy especial: dar con el jefe de científicos de Hitler, un tipo con identidad oculta que era conocido por el nombre en clave de Klingsor. Para descubrir al hombre que se escondía tras tan esquivo personaje, Bacon cuenta con la ayuda de Gustav Links, un matemático alemán que participó en la Operación Valquiria, el frustrado intento de asesinar a Hitler llevado a cabo por una serie de militares alemanes. Sin embargo, ésa no es más que una de las anécdotas de su oscuro pasado.

Llega un momento en que la búsqueda de Klingsor pasa a segundo plano, pues el verdadero centro de la novela son los devaneos amorosos de cada uno de los dos protagonistas, el uno en presente y el otro en pasado, y largas disertaciones sobre ética científica en torno al desarrollo de la bomba atómica, rivalidades entre científicos de distintas especialidades, narraciones pormenorizadas de acontecimientos históricos como la Operación Valquiria... No puede decirse de En busca de Klingsor que sea una novela de acción trepidante porque, aunque cuenta con buenos ingredientes (hay pasajes realmente interesantes), en mi opinión se pierde en los detalles, y el narrador quiere contar tantas cosas diferentes que no logra que el lector interiorice ninguna de ellas. No puedo decir que En busca de Klingsor me haya apasionado, porque la verdad es que, cuando leía las últimas sesenta páginas, lo único que podía pensar era: "a ver si se acaba de una vez".

Puntuación: 6

viernes, 21 de enero de 2011

El callejón de la Medianoche

Título: Los vampiros de Morganville III: El callejón de la Medianoche
Autor: Rachel Caine
Año de publicación: 2007
Editorial: Versátil

Hoy estoy de un humor excelente, en parte porque este libro me ha dejado un extraordinario sabor de boca. Llevo algún tiempo sin sentirme satisfecha del todo con los libros que leo, y debo reconocer que El callejón de la Medianoche me ha sorprendido muy gratamente. Atrás queda el decepcionante inicio de la saga con La mansión Glass, si ya la segunda entrega mejoró sensiblemente respecto a su predecesora, El callejón de la Medianoche se alza como la mejor narrada de las que llevo leídas hasta ahora. Leo en Wikipedia que Rachel Caine ha firmado por un total de doce novelas que conformarán la saga de Los vampiros de Morganville, de los que se han publicado nueve en Estados Unidos. Mientras mantenga el nivel y el ritmo narrativo, puedo augurar una saga interesante.

Tras los desasosegantes acontecimientos que tuvieron lugar en El baile de las chicas muertas, Claire no ha tenido más remedio que aceptar la Protección de Amelie para sobrevivir, algo que oculta deliberadamente a Michael, Eve y sobre todo a Shane. Las cosas empiezan a cambiar para ella, no sólo porque Monica parece respetarla de repente, sino porque Amelie no tarda en revelar el motivo por el que está tan interesada en ella: quiere que se forme e investigue un asunto de gran importancia. Por si sus problemas fueran pocos, empiezan a aparecer chicas muertas y todo el mundo parece inclinado a pensar que ha sido Shane, aunque el demente hermano de Eve, Jason, campe a sus anchas por ahí, amenazando a Claire para lograr sus fines.

Página a página se desenvuelve ante nuestros ojos la vida de Claire, cada vez más alejada de la normalidad, y con un ritmo cada vez más rápido nos hace partícipes Rachel Caine del peligro que suponen los vampiros, que para variar, son los malos de la película (es una de las cosas que más me gustan de esta saga; al menos, cambia un poco respecto a la corriente imperante), aunque por el público al que está dirigida la novela, la violencia no se prodiga demasiado. Claire se alza como heroína indiscutible y curiosamente, en mi opinión, no destaca tanto como héroe Shane (que además de ser ese chico malo por el que suspiran todas las chicas es el novio de Claire), sino Michael, que parece estar metido en todos los fregaos pero no da el cante tanto como Shane.

En resumen, la saga de Los vampiros de Morganville promete porque el romance queda en segundo lugar para destacar la acción y el suspense, y aunque no sea una obra maestra en ninguno de los dos géneros (y sigo diciendo que falta un poco más de sangre), resulta entretenida y bastante mejor que otras novelas del mismo género que se anuncian por ahí a bombo y platillo.

Puntuación: 8

miércoles, 19 de enero de 2011

Hakuouki Shinsengumi Kitan

Título: Hakuôki Shinsengumi Kitan
Estudio de animación: Studio DEEN
Número de episodios: 22
Distribuidora en España: Ninguna
Emisión original: 2010

Vale que me las doy de intelectual, pero a veces incluso yo necesito un poco de fanservice. Por eso empecé a ver este anime, aunque sabía a lo que me exponía. Pocas veces una adaptación al anime de un videojuego da buenos resultados, pero, eh, tenía que intentarlo. Ya que no puedo jugar a los juegos originales, al menos, conocería la historia más allá de lo que se puede deducir de las imágenes oficiales del juego. Por supuesto, sabía que no debía esperar demasiado: un otome game siempre será un otome game.

Hakuôki nos presenta a Chizuru Yukimura, una muchacha de Edo cuyo padre parte en un viaje a Kioto. Al ver que no regresa, decide partir ella misma en su busca, y para ello se disfraza de chico. No obstante, al llegar a Kioto se topa con algo que no esperaba: una horda de samurais que parecen poseídos por una frenética sed de sangre y el Shinsengumi, una especie de cuerpo policial que vela por los intereses del shogunato. Ellos la arrestan para averiguar qué ha visto, y es que la existencia de esas criaturas, conocidas como rasetsu, está más relacionada con el propio Shinsengumi de lo que están dispuestos a permitir que se sepa, pero al descubrir el sexo de Chizuru, le ofrecen protección a cambio de su silencio, ya que ellos también están muy interesados en hallar el paradero del padre de la chica.

Tal vez los profanos en la materia se estén preguntando qué demonios es un otome game. Lo explicaré brevemente: los otome games son videojuegos destinados al público femenino y se engloban dentro de los llamados "juegos de citas", es decir, son aventuras gráficas en que el jugador/a se pone en la piel del protagonista (generalmente de su mismo sexo, de ahí que los otome games sean para chicas, ya que la protagonista es una chica) y aparecen una serie de personajes del sexo opuesto (o del mismo, hay juegos para todos los gustos). El jugador/a puede elegir a uno de ellos para desarrollar una relación, y normalmente cada personaje lleva añadidos unos requisitos para lograrlo, además de ciertos cambios en la línea argumental del juego. Este tipo de videojuegos son muy populares en Japón, pero hasta donde yo sé, apenas han salido de allí. Hakuôki Shinsengumi Kitan es un ejemplo de un juego de gran popularidad, con varias entregas para distintas videoconsolas, tanto portátiles como de sobremesa. En todos ellos la protagonista es la misma, y como personajes susceptibles de desarrollar una relación con ella se encuentran personajes históricos (convenientemente rediseñados como bishônens por la ilustradora de la saga, mi admirada Kazuki Yone) como Toshizô Hijikata, Hajime Saito, Sôji Okita, Sanosuke Harada o Heisuke Tôdô, además del antagonista del juego, éste ficticio, Chikage Kazama. Otros personajes, tanto históricos como ficticios, desfilan por las distintas entregas de la saga.

No es raro ver series manga y animes que incorporan elementos, personajes e incluso acontecimientos históricos a su trama, por lo que a nadie debería escandalizarle este apropiamiento de Hakuôki. Después de todo, los Shinsengumi son los héroes románticos japoneses por excelencia: abnegados guerreros que combatieron por sus ideales y murieron por ellos uno tras otro. Se me ocurren varios títulos que hacen algo similar. No niego que posiblemente en los videojuegos funcione (a la vista está su éxito), pero la adaptación al anime hace aguas por todas partes, en mi opinión porque trata de ceñirse demasiado a los acontecimientos que tuvieron lugar durante la Revolución Meiji, de modo que llega un momento, sobre todo durante la segunda temporada (los 22 episodios de Hakuôki se dividen en dos temporadas: la primera, de 12 episodios, se tituló sencillamente Hakuôki Shinsengumi Kitan. Al finalizar ésta, y visto su éxito, se realizó una segunda de 10 episodios llamada Hakuôki Hekketsu-roku), en que la presencia de los personajes no históricos, y todo lo que éstos aportan a la historia (esto engloba a la propia protagonista, lo cual no deja de ser grave) parece metido con calzador y salpica una crónica de las derrotas del disgregado Shinsengumi durante su etapa de declive, sólo que con chicos guapos donde deberían ir los rudos samurais que fueron sus integrantes (y bastante feos, la verdad). En resumen, que la mezcla entre elementos reales y elementos ficticios resulta bastante mal, en definitiva, y si a eso le sumamos que Hekketsu-roku apenas tiene momentos de alivio cómico y que (atención, spoiler) empiezan a morir personajes y cuando te quieres dar cuenta no queda ni uno (fin del spoiler), lo cierto es que la segunda temporada en general desluce bastante a la primera, que sin ser ningún prodigio es entretenida, aunque viéndola se note que los sucesos que tienen lugar en ella sin un "best of" de los videojuegos iniciales.

Vaya, la verdad es que yo quería destrozar esta serie y no parece que lo esté logrando... Supongo que en el fondo siento debilidad por ella, ya que me hice fan de sus geniales diseños e ilustraciones antes de que Idea Factory tuviese la genial idea (qué ironía más cruel) de estrenar este anime cuya única virtud real es la de aclarar la base del argumento: por qué está Chizuru en Kioto, qué relación existe entre su padre y los rasetsu, qué es el ochimizu, quién es Chikage Kazama y cuáles son sus planes, y poco más. Como además no tengo claro si las distintas entregas de la saga de videojuegos son lineales o se solapan, el resultado sigue siendo caótico.

Puntuación: 5

jueves, 13 de enero de 2011

Furia

Título: Crónicas Vampíricas III: Furia
Autor: L. J. Smith
Año de publicacíón: 1991
Editorial: Destino

Últimamente me rodea el furor que está generando The Vampire Diaries, la adaptación televisiva de la saga de libros llamada en nuestro país Crónicas Vampíricas. Como no me animo a ver la serie, decidí leer la tercera entrega de la saga, que cierra la trilogía original. En mi crítica de la primera entrega, Despertar, exponía brevemente el desarrollo de esta saga que cuenta actualmente con seis volúmenes publicados y un séptimo en camino. Se ha confirmado que tras publicarse éste a lo largo de este año, L. J. Smith escribirá una tercera trilogía que continuará el desarrollo de la segunda, y si esta se vende bien, habrá otra más que concluirá la historia. En total, trece libros para lo que en principio iba a ser una trilogía. No cabe duda de que, entre el boom de la novela romántica paranormal adolescente y la serie de televisión, el triángulo entre Elena Gilbert y los hermanos Salvatore está resultando de lo más rentable a su autora.

Al igual que sucedía en la entrega anterior, el comienzo de Furia se sitúa inmediatamente después del desenlace de Conflicto. Elena ha despertado convertida en vampiro en compañía de los inefables Damon y Stefan. Mientras se adapta a su nueva condición, logra descubrir que Damon sólo no es tan malo como parece, sino que además está dispuesto a ayudarles a descubrir al Otro Poder, la misteriosa entidad que cometió los crímenes que Stefan atribuía a su hermano.

No resulta raro comprender por qué la popularidad de Damon comenzó a crecer como la espuma, convirtiéndole en el héroe (o antihéroe) por excelencia de la saga hasta el punto de protagonizar la segunda trilogía de las Crónicas Vampíricas, conocida en su país de origen con el subtítulo The Return (en España se les llama sencillamente Damon con el título del volumen en concreto a continuación). En esta novela despliega el personaje todo su encanto como malote capaz de encandilar a cualquier chica que deja al pobre Stefan a la altura del betún; aunque Elena manifiesta a menudo lo mucho que le quiere, en comparación con la masculina rudeza de Damon parece una damisela llorosa, más ñoño aún (y ya es decir) que Edward Cullen de Crepúsculo.

El desarrollo de Furia es un tanto extraño, muy acelerado, con grandes espacios de tiempo que pasan de un capítulo a otro. Se nos trata de transmitir la lucha contrarreloj de los tres protagonistas y sus amigos para detener al Otro Poder, pero el resultado es algo confuso. Sí que se pueden resaltar, sin embargo, algunos pasajes verdaderamente bien logrados a nivel de sentimientos que transmiten los personajes, como es la escena en que Elena presencia su propio entierro al creerla muerta en Fell's Church, eso cuando no está Damon derrochando carisma por ahí, claro.

Un dato inquietante: la existencia de más novelas me genera una enorme curiosidad, más allá de mi propio interés por los libros con "continuará". Recordemos que la cuarta entrega de Crónicas Vampíricas nació gracias a la presión de los fans, que deseaban saber qué sucedía tras el desenlace de Furia. No obstante, leyendo la primera trilogía, una se da cuenta fácilmente de que está concebida de principio a fin como una historia autoconclusiva, y el final de su tercer volumen no deja cabos sueltos de ningún tipo. Por eso ahora quiero saber qué sucede en Invocación. Ahora es cuestión de puro interés científico como aspirante a escritora.

Puntuación: 7

domingo, 9 de enero de 2011

Adventureland

Título: Adventureland
Director: Greg Mottola
Intérpretes: Jesse Eisenberg, Kristen Stewart, Ryan Reynolds, Martin Starr
Año de estreno: 2009

Debo reconocer que gran parte del interés que despertó en mí esta película se debe a la presencia de Jesse Eisenberg en un papel protagonista de ésos que me gustan a mí: un chico tímido, algo friki, que se ve rodeado por un mundo hostil. En Bienvenidos a Zombieland, donde Eisenberg interpretaba a Columbus, ese mundo hostil era una América devastada por los zombies. En Adventureland, ese mundo resulta ser uno de esos pueblos de la América profunda en el que las convenciones mantienen atrapados a los protagonistas. Pero lo más interesante de Adventureland es, para mí, la manera que tiene de tocar un tema que a mí me resulta cercano.

Estamos en 1987. James Brennan es un brillante graduado en Periodismo que sueña con estudiar un posgrado en la Universidad de Columbia. No obstante, su futuro idealizado se ve truncado cuando su padre le comunica que le han transferido de departamento en su empresa y que, por tanto, ganará mucho menos. De un plumazo, James se queda sin viaje por Europa (su regalo de fin de carrera) y sin posgrado en Nueva York, de manera que regresa a su ciudad natal, Pittsburgh (Pennsylvania), donde se pone a buscar trabajo frenéticamente. Sólo encuentra una vacante en Adventureland, el decadente parque de atracciones poblado por jóvenes en una situación similar a la suya, que odian trabajar allí. Sin embargo, James conoce a la fascinante Emily, una chica  de familia acomodada que trabaja en Adventureland para escapar de su hogar, que detesta.

Adventureland no ha tenido el impacto de otras producciones indies como Pequeña Miss Sunshine o Juno a pesar de tratar un tema tan cercano a la mayoría de los jóvenes que terminan la universidad: la incertidumbre de qué hacer cuando uno acaba los estudios, el deseo de no regresar a la vida con los padres, la sensación de que eres demasiado joven para conseguir un empleo estable... Todo esto queda enmarcado en la sociedad de Pittsburgh, plagada de ese pensamiento carente de expectativas y plagado de prejuicios que parece destinado a cortar las alas a los jóvenes. La ambientación de finales de los 80 ayuda, por supuesto, aunque en muchas ocasiones una se pregunta si no seguirá siendo igual...

El mayor peso interpretativo recae en la pareja protagonista, aunque los distintos personajes dan mucho color a las desventuras de James y Emily en Adventureland. Destaca Ryan Reynolds, que a la chita callando retrata a la perfección a Mike Connell, un personaje fundamental en la trama, o Margarita Levieva como Lisa P., una vampiresa adolescente que halla en James al único chico que no fantasea con ella a todas horas. Jesse Eisenberg se luce con un personaje que recuerda mucho a Columbus, dándole ese toque tan personal que hace tan entrañables a los personajes de ese estilo (curiosamente, Adventureland y Zombieland se estrenaron el mismo año). En cuanto a Kristen Stewart, ésta y otras películas rodadas entre las entregas de la saga Crepúsculo le están valiendo cierto reconocimiento como actriz, valor éste del que no puede alardear como protagonista de dichas películas. En Adventureland dibuja a un personaje hastiado de todo y convincente, con gancho.

Como decía, la ambientación ochentera es buena, no demasiado acusada (ya es a finales de dicha década), pero correcta. Destaca la imagen algo cutre no sólo del propio parque de atracciones, sino de los bares y lugares públicos que visitan los personajes: resultan altamente creíbles. La música, muy buena, salpica diversos momentos de la cinta, en ocasiones integrándose en la trama y reforzando los sentimientos que pretende transmitirnos el director en cada momento, sobre todo con Satellite of Love de Lou Reed, un cantante al que se hace mención repetidas veces durante la película.
Puntuación: 9

viernes, 7 de enero de 2011

Nocturna

Título: Nocturna
Director: Adrià García, Víctor Maldonado
Intérpretes (voces): Imanol Arias, Carlos Sobera, Natalia Rodríguez
Año de estreno: 2007

Desde luego, cualquiera diría que sólo veo cine de animación. La verdad es que no puedo evitarlo:  me encanta ahora como me encantó siempre, y aunque el cine de animación nos ha dado grandes películas, mucha gente, incluidos numerosos críticos, siguen mirando con una especie de condescendencia a estas películas, casi como si ellos, en su magnanimidad, les permitieran existir. Pero bueno, todos sabemos cómo son de dogmáticos los críticos profesionales. El caso es que, mientras ellos le perdonan la vida a la animación, ésta nos obsequia con pequeñas y grandes películas a la altura de cualquier estudio de Hollywood. Algunas se ven recompensadas en las entregas de premios, mientras que otras resultan casi desconocidas a pesar de ser de una excelente calidad. A esta categoría se adscribe Nocturna, una película española que ganó un Goya a la Mejor Película de Animación pasando, y esto no lo sé seguro pero me lo imagino, de puntillas por unas pocas salas madrileñas.

Tim es un huérfano solitario a pesar de vivir en un orfanato rodeado de otros niños. Tiene miedo a la oscuridad, por lo que cada noche abre a escondidas una ventana para dormir a la luz de las estrellas, especialmente de su estrella, Adhara. No obstante, una noche comienzan a apagarse las estrellas, y Tim decide encontrar al responsable. Acompañado del Pastor de Gatos, el niño se adentra en el fascinante mundo de Nocturna en busca del señor Moka, el único que conoce todos los secretos que rodean al mundo de noche.

Nocturna es, ante todo, una película infantil con una mitología realmente magnífica, que nos explica cómo son y, sobre todo, cómo trabajan los duendecillos culpables de que se nos enrede el pelo mientras dormimos, soñemos o nos caigamos de la cama. El dibujo, muy personal y con un toque naïf, se aleja de los cánones anatómicos para recordarnos a las modernas ilustraciones de los cuentos, con una gama cromática azul y negra para la oscuridad y entre amarilla y beige para la luz que le aporta un carácter poco habitual en el cine infantil de estas características. La animación es de una gran calidad, de hecho sorprende la minuciosidad de sus detalles, que enriquece esta fábula que en otras cinematografías podría llegar a adquirir el carácter de película de culto entre adultos pese a estar concebida como película para niños.

Puntuación: 7

lunes, 3 de enero de 2011

Megamind

Título: Megamind
Director: Tom McGrath
Intérpretes (voces): Will Ferrer, Tina Fey, Jonah Hill, Brad Pitt
Año de estreno: 2010

Una buena amiga de cuyo gusto en cuestión de películas suelo fiarme me recomendó vivamente Megamind diciéndome que, si con la franquicia Shrek DreamWorks había dado una vuelta de tuerca a los cuentos de hadas, con Megamind hacía lo mismo con las películas de superhéroes. Aunque en ese momento pensé que eso no era nuevo, lo cierto es que no tenía en mente ver Megamind, que al final me ha gustado bastante más de lo que pensé. Revisando la filmografía de animación por ordenador de este estudio, resuelvo que, de las que he visto (Antz, Shrek, Shrek 2, Shrek III, Bee Movie, Kung Fu Panda, Cómo entrenar a tu dragón y la más reciente, Megamind; casi todas, en resumen), Shrek 2 y Megamind se alzan como mis predilectas.

Megamind es un extraterrestre que llega a nuestro planeta al mismo tiempo que su eterno rival, Metro Man. Mientras el primero se ve abocado a convertirse en un supervillano, el segundo se opone a él como el siempre vencedor superhéroe que defiende Metro City de los maquiavélicos y a menudo ridículamente malvados planes de Megamind. No obstante, esa rutina de combates y derrotas por parte del malo de la peli llega a su fin cuando Megamind logra, por fin, acabar con Metro Man. No tarda en darse cuenta de que, como supervillano, su vida no tiene sentido sin un superhéroe que trate de detenerle, por lo que se embarca en la misión de crearse un enemigo a su altura.

Gran parte del encanto de Megamind reside en su protagonista, que aparece retratado como una "víctima de la sociedad" y que consigue caernos bien desde el minuto uno del metraje, al igual que su inseparable Esbirro y otros ingenios creados por él, y el hecho de que sea azul y no hable bien no lo hacen sino más adorable. A Megamind se deben las mejores frases y situaciones de la trama, y los demás personajes tan sólo gravitan en torno a él, aunque algunos, como Metro Man, tienen mucha miga (el doblaje por parte de Brad Pitt debe ser delirante en versión original). La nota femenina la pone Roxanne Ritchi, una periodista que, aunque parece un refrito de Lois Lane, tiene una personalidad de lo más marcada y además odia a Megamind, cosa grave ya que nuestro azul protagonista bebe los vientos por ella... Al final, son los sentimientos de los personajes lo que acaba desencadenando los acontecimientos, pero todo sucede con tanta naturalidad que casi ni se nota.

DreamWorks despliega todo su savoir faire en animación en 3D en esta película, de una calidad francamente asombrosa. El viento, la lluvia, las explosiones... tienen un efecto realista que contrasta los rasgos exagerados y propios de los dibujos animados de cada personaje, integrándose con ellos. El colorido es variado, los ambientes cambian constantemente... En mi opinión es una película mucho más variada que otras obras del mismo estudio. Además, en Megamind se despliega una interesante banda sonora plagada de canciones populares que nos arrancan una sonrisa cada vez que suenan: ¿no es genial la escena final, con ese Bad de Michael Jackson a todo trapo mientras Metro City se marca un baile?

Puntuación: 8